
La depilación láser es una opción popular para la reducción del vello no deseado debido a su capacidad de proporcionar resultados duraderos.
El láser dirige luz concentrada al pigmento en los folículos pilosos, convirtiendo la energía en calor y dañando los folículos para retardar el crecimiento del vello. Es más efectivo en personas con piel clara y vello oscuro, aunque las tecnologías avanzadas han ampliado su eficacia a más tipos de piel y colores de vello.
Se requieren múltiples sesiones para resultados óptimos, generalmente de 6 a 10, dependiendo del área tratada y otros factores individuales. Las sesiones se espacian entre 4 y 6 semanas para alinearse con el ciclo de crecimiento del vello.
La mayoría de las personas experimentan una reducción del vello de entre un 70% y un 90% después de completar el tratamiento. Los resultados son semipermanentes, con posible crecimiento leve y disperso del vello con el tiempo.
Las sesiones de mantenimiento, cada 6 a 12 meses, ayudan a mantener los resultados y tratar cualquier nuevo crecimiento del vello.
La depilación láser ofrece una solución duradera y efectiva para la reducción del vello. Consultar con un especialista y seguir un régimen de tratamiento adecuado son claves para obtener los mejores resultados.